Sobre @ArizonaRockCoach

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Princesa Hechicera del Reino Indómito de Urumaco; guarapera empedernida, coach ontológico, pasajera, y transeunte de una vida Sin Desperdicio

Guarapo

La Real Academia Española explica que la palabra "guarapo" es una voz quechua cuya definición reza: "Jugo de la caña dulce exprimida, que por vaporización produce el azúcar".

Para nosotros los venezolanos, el guarapo aparte de refrescar, también se asocia al temple y poder de decisión. Este blog tiene por meta refrescar con dulzura la fuerza en el corazón, y ayudarnos a continuar con optimismo y coraje este incierto camino que, cada vez más escabroso, se llama vida.

jueves, 27 de mayo de 2010

El Perdón nos acerca al tesoro

Nunca he dicho que soy perfecta, ni que encontré el nirvana, ni que he sido iluminada, ni que soy un ángel. Comparto las experiencias que me han enseñado ciertas claves para ser feliz.

He caído tantas veces, que ahora lo hago con más gracia. Me he levantado tanto, cada vez más rápido. Y me he pelado con muchas personas y tan profundamente, que ya no le echo la culpa a los demás. Aprendo, me levanto, PERDONO y sigo.

A tantos les cuesta entender el aprecio que le tengo a mi ex esposo, el cariño con el que saludo a los que han hablado güevonadas de esta negra, y mi (ex celente) relación con mis ex novios. Esta es la respuesta: Perdón! No es fácil, no es sencillo, lleva tiempo y a veces no es merecido, pero es una manera rápida de continuar. Porque de eso se trata: de fluir con gracia y optimismo en esta serie de eventos e interesantes conexiones que es la vida.

El perdón es mejor para quién lo da, que para quién lo recibe. Al perdonar le restamos efecto al daño, y le quitamos poder a la mala intención. Al perdonar reducimos el peso de la carga, liberamos la mente y el corazón, y nos elevamos sobre la circunstancias, haciéndonos más y más grandes.

¿Que no se debe OLVIDAR lo ocurrido? es cierto, es una experiencia, una lección. Es información con la que perfilas a los involucrados, reconoces tus errores, analizas acciones-reacciones-consecuencias, y asumes nuevas posturas (le haces la cruz a alguien, le tratas con cuidado, desconfías, y hasta te puedes descargar a gritos y/o golpes), pero hasta ahí! No es bueno quedarse estancad@, porque la vida sigue, el mundo avanza y los demás también.

Perdonar, no conlleva de profundos conocimientos de alquimia, de mucha elevación espiritual o de baja autoestima. Perdonar es un hecho heroico, que requiere coraje y gallardía, ganas de avanzar y una visión pragmática de las circunstancias. Eso es todo!

De sentir que hemos herido a alguien, lo mejor es pedir perdón. De ser terrible el daño, no nos queda más que buscar la redención y sólo en nosotros se encuentra, sin embargo al perder el camino es bueno la ayuda de alguien que te diga por donde ir.

Perdonarnos a nosotros, es un poco más difícil, no imposible. Dependiendo de los esquemas de valores morales, la culpa y los remordimientos son escandalosos pasajeros en el corazón, para unos más que para otros. Es allí, en ese paraje inhóspito al que nos conduce la conciencia cuando hemos obrado mal, donde más solos y miserables nos sentimos, donde la vergüenza nos cose el mentón al pecho y la oscuridad no nos deja ver las estrellas. Y ante tan engorroso camino, no nos queda otra que levantarnos de nuestras cenizas, pegar los pedacitos y recurrir a nuestro super héroe interno para que con sus superpoderes nos ayude a enfrentar la situación, no a escapar de ella. Créeme, por muy utópico que suene: sí se puede, todos podemos, todos tenemos la fuerza.

Al fin y al cabo, todos buscamos el tesoro que se esconde detrás de la felicidad. Aprender a perdonar es una herramienta más, que puedes (o no) tomar para alcanzar tu meta. Porque de que hay otras formas de ser felices las hay, pero ésta es sana, bien fundamentada y positiva, y sobretodo ligera para el espíritu.

1 comentario:

  1. que bueno mi negrura escribiendo. Eso sí que es bueno para el alma. Desde aquí te sigo y bebo un poco de ese guarapo. Adelante!

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