Mindfullnes

Fotografía: Cheché Díaz Yugurí

A propósito del día de la felicidad, que debería ser todos los días, comparto con ustedes la carta que un amigo muy especial escribió para su primo Rubén que vive fuera del país.

Se trata de un documento cargado de vivencias, dolor, crecimiento, expansión y mucho amor, que relata una filosofía que nos invita a encontrar en la sencillez, la paz como método para alcanzar una vida plena. Es todo un guarapo. Me encanta que haya llegado a mi.

Ruben, buenos días. Espero que hayas dormido bien y hayas amanecido, respirando y riendo. Te explico. 

Después de haber vivido algunos años, y pasar por momentos de tanto dolor, y con la ayuda de la neurología, la sicología y la contemplación, he llegado a la conclusión de que VIVIR ES RESPIRAR Y REIR … y pensar en lo práctico, o sea, ser inteligente. 

La felicidad no la vas a encontrar en el mundo exterior, sino dentro de ti. Y aún algo más, la paz. Y quizás algo aún más profundo, una sensación indescriptible, llamémoslo Dios, etiquétalo como quieras, Cristo, Ala, Buda, no importa. Lo importante es vivirlo. Pero para lograr este estado de bienestar, debes primero entender que tienes un enemigo, el único. No es tu pareja, o tu trabajo, o tus padres, o el país donde vivas, no es algo o alguien o una situación, es una vocecita que tienes en tu cabezota. Si lo llegas a comprender y lo pones en práctica, a partir de ese momento la vida fluye, el mundo deja de ser hostil y nadie es tu enemigo. El dolor entonces toca enfrentarlo, ya no puedes culpar a nadie ni a nada. De repente, te sientes libre. Cuantas veces no nos decimos, no soy feliz por culpa de la pareja, o por culpa de mis padres, o por lo que sea. Ahora no, ahora es enfrentar el sufrimiento sin culpar a nadie.

La vocecita puede ser también un pensamiento, una imagen, un recuerdo o una fantasía, los sicólogos tienen una palabra técnica, le llaman EGO. Yo le seguiré llamando la vocecita, me gusta, llega más. La vocecita vive en dos mundos que no existen, el pasado y el futuro. A través de ella, y al vivir en dos mundos inexistentes, nos volvemos inconscientes, nos volvemos locos. Y nadie Ruben, elige la locura. Y lo peor, no vivimos lo único que tenemos: este instante, el aquí y el ahora. 

Si es cierto, del pasado tomamos los errores, como experiencia, para no volverlos a cometer; y el futuro, que no sabemos ni siquiera como va a ser, requiere a veces de una planificación, establecernos una meta. Pero ten cuidado, la vida es como una escalera con muchos peldaños. El último, es la meta. La mayoría por no decir todos, vive cada peldaño pensando en el último. La idea es vivir cada peldaño, cada instante, sin tomar en cuenta el siguiente o el último. A veces ni siquiera llegamos a la meta, pero podemos decir sin embargo, que hemos disfrutado cada uno los peldaños que hemos subido . 

La vocecita empieza temprano en la mañana. Durante el día con el estudio o el trabajo, se distrae, no molesta tanto. A veces en la noche, no nos deja dormir. Cuando estás identificado con ella, y en ese momento vive en el pasado, te deprimes, te pones triste. Si en ese momento, vive en el futuro, te da ansiedad, miedo o estrés. 

¿Quieres saber si eres la vocecita? Cuando eres ella, siempre deseas, no estás conforme, te sientes vacío. Cuando eres ella, vives quejándote, no dejas de quejarte. Cuando eres ella, te sientes víctima. La vocecita no enfrenta el dolor, lo oculta. Busca en una relación especial, en el dinero, en el reconocimiento, en el trabajo, en el alcohol, en las drogas, busca en algo o alguien poder tapar el dolor. Pero todo en la vida son ilusiones, tarde o temprano desaparecen. Y aunque se mantengan esas ilusiones, nos aburrimos. Y el dolor vuelve, y a veces con más intensidad. Ya aquel carro q me gustaba no me llama la atención; la novia o la esposa, que lo habíamos responsabilizado por hacernos feliz, tremendo error por cierto,  ya no me ocultan mi sufrimiento, las peleas que eran cortas al principio, se vuelven más largas e insoportables; llego a tener dinero, pero sigo vacío igual y así con todo lo que el mundo exterior nos ofrece. No significa que tener dinero, o tener una relación especial, o tener un trabajo, o tomarse unas cervezas, lo que sea, sea malo. Lo malo es utilizar todos estos elementos para ocultar el sufrimiento. Por eso, saltamos de pareja en pareja, de trabajo en trabajo, llegamos a tener hasta todo, como el caso del actor Robin Williams, pero la vocecita ese día tan trágico le dijo: pégate una correa en el cuello y ahórcarte. La vocecita termina autodestruyéndose. 

Quizás hayas oído hablar de una técnica moderna y muy avanzada de meditación llamada MINDFULNESS. A través de estos ejercicios, llevados a cabo por un gran científico español, el psicobiólogo Vicente Simón, vas a recablear tu cerebro, vas a lograr que sea más productivo y creativo, vas a tener las herramientas para callar ese ruido mental que a veces nos atormenta y eso solo lo vas a lograr en estado de atención plena (MINDFULNESS). Hay un científico norteamericano, Richard Davison, que ha logrado descifrar, utilizando la ciencia, la actividad cerebral que se lleva a cabo en este estado. Si estás interesado en mayores detalles, puedes consultar en internet. Ruben, vas a encontrarte contigo mismo, vas a disfrutar de tu cuerpo, conocerlo mejor, las sensaciones, etc. En ese estado no hay miedo, no hay esperanza, no hay pasado, no hay futuro. 

Esta técnica, ya está siendo utilizada en muchos colegios y universidades de Europa y EEUU, sobretodo para controlar las emociones en los jóvenes, algo que a nosotros nunca nos enseñaron. Una vez que la domines, enséñasela a otros, pero primero profundiza tú el tema. 

Una vez que domines a la vocecita, ya no te sentirás mal o aburrido o con miedo cuando estés solo, ya no dependerás de tus familiares o amigos, ya te encontraste, ahí está la felicidad, ahí está la paz. Como nadie es responsable de tu felicidad o el culpable de tu dolor, toca entonces crear un espacio, por ejemplo, entre tu pareja y tú, entre tus amigos, entre tu familia, donde haya 3 elementos: amor, paz y alegría. Si algunos de ellos no existe, o desaparece, o va y viene, entonces significa que entró la vocecita a perturbar ese espacio.  

Si te conviertes en el observador, y dejas de ser la vocecita  (como ves son como dos personas que viven dentro de ti), ya la mente no te va a utilizar a ti (la vocecita). En cambio, ahora tú vas usar la mente, o sea, vas a pensar en lo práctico, vas a ser inteligente. 

Algo más. La vocecita es muy habilidosa, te acompaña desde que tienes uso de razón, a veces ha acertado. Ella se niega a morir. A veces es muy fuerte, quizás sea tu caso. Es un ruido mental que no te deja tranquilo, casi ni te soportas. Los sicólogos le llaman el SUPER EGO. Estos ejercicios te van ayudar a mitigarla, a no hacerle caso o por lo menos, no tomarla tan en serio. Si se quiere es una meditación formal, algo que no me resulta del todo convincente, pero si es la mejor herramienta que he encontrado para callar ese ruido que tienes en la cabeza y no te permite vivir el presente. 

Ahora sabes que eres el observador, el consciente, él que vive el instante, llamémoslo tu verdadero yo; pero también sabes que eres la vocecita. Tú decide a partir de hoy, quien quieres ser. Por favor Ruben, no le hagas caso a la vocecita, o por lo menos no la tomes en serio. A partir de ahí, la vida fluye, comprenderás entonces que VIVIR ES RESPIRAR Y REÍR …. y pensar en lo práctico.

Si aún no estás convencido, vete a un cementerio. Ahí encontrarás a los pobres, a los ricos, a los blancos, a los negros, a los ingenieros, a los indigentes, a todos. El final es el mismo: la muerte. Entonces despiertas y te dices que tonto he sido. Sufra o no, tenga dinero o no, sea profesional o no, tenga pareja o no, el final es el mismo.

Ruben, y para finalizar, el primer paso para llegar a ese destino, donde el sufrimiento ya no existe o es mínimo, es calmar la mente, para poder ver con claridad. Habemos muchas personas, la mayoría, por no decir todas, que necesitamos el mindfulness para lograrlo. 

Y cuidado con los conceptos, o la palabra de Dios que encuentras en la Biblia o en el Corán, en la ciencia misma. Ellos son como un mapa, que te ayuda a encontrar un lugar desconocido. Pero una vez que llegas, botas el mapa, ya no lo necesita. Una vez que encuentres tu felicidad, o la paz o a Dios, bota el mapa. Ahora toca vivir esa experiencia. Hay personas que tienen hasta 20 mapas, si son católicos, o a cristianos, o ateos, o comunistas o capitalistas y para tú de contar. Sobre todo aquellos que logran a encontrar a Dios, pero no lo viven, solo se expresan a través de un Dios conceptual, que les habla, les aconseja, los recrimina, los castiga. Tampoco es Dios, es la vocecita. En nombre de Dios la humanidad ha hecho guerras. Y ese es precisamente, a mi entender, el problema de la humanidad: tomar muy en serio a la vocecita.

Saludos y mucha suerte. Luego me cuentas.